Necesito silencio,
para oír lo que mi corazón dicta,
y saber si esta listo para olvidar.
Necesito un breve instante de paz
para poder llorar,
sin que nadie lo note
sin consuelos entupidos,
ni caricias falsas,
yo solo necesito
algo de soledad.
Para verter en un vaso mis penas y dolor,
para contarle al silencio
que estoy sufriendo de amor,
un amor profundo,
algo que nunca existió,
un producto de mis fantasías,
una falla en mi corazón,
un instante de locura
que por curiosidad a conocerlo
perduro hasta hoy,
y con seguridad digo que no lograre vencer este delirio,
este pesar maldito
que condena mi vida a amarte,
quizá sea una enseñanza del destino
que deja en claro que no nací para amar,
que el amor hace daño,
que me castigo con solo pensarlo.
Necesito estar distante de los sueños,
de los pensamientos,
de todo lo que me recuerde su nombre, su rostro, su voz.
Quizá el tiempo borre su rastro,
y mi espirito oculte las cicatrices es este amor envenenado.
O tal vez sea tarde y esté todo perdido,
tal vez mi única función en esta vida es amarte y sufrir...
quizá mi vida sea de corto plazo
y los últimos granos de arena estén cayendo del reloj.
Pero no me importa, porque he conocido el lado oscuro del amor,
he logrado conocer el sufrimiento, el dolor...
Pero aún así he logrado salir adelante.